Acron: ataque de las ardillas – Oculus Quest es un juego singular, interesante y grupal donde podemos pasar horas de diversión sana. Es quizá uno de mis juegos preferidos del momento. La realidad virtual está en su etapa de despegue, por ello es importante seguir a detalle cada nuevo lanzamiento.
Por eso te explicaré en qué consiste este juego.
Ahora podrás convertirte en una ardilla o arbol virtual con este juego. Yo prefiero ser una ardilla cuando mis mejores amigos no tienen unos Oculus Quest y así podemos armar estrategias juntos para robar nueces, pero la situación cambia cuando juego con desconocidos; es allí cuando prefiero ser el árbol malvado y malograrle la fiesta evitando que se roben el fruto.
Si buscas experiencias entretenidas, casuales y que te permitan desestresarte; seguramente será de esta empresa: Resolution Games. Ellos han creado Angry Birds VR y Bait. Juegos que destacan por su simpleza pero de gran atracción.
Acron admite hasta ocho jugadores locales, pero para iniciar te recomiendo que sean 3 o 4 para que el usuario árbol pueda adaptarse. Por otro lado, les comento que el tercer jugador del video (shisha) no estuvo presente en la misma habitación, pero sí usaba la misma red.
La misión
Un grupo de ardillas está tratando de robar muchas bellotas o nueces doradas de un árbol, pero obviamente, dicho árbol no dejará que se roben sus frutos. El juego no acaba aquí, pues “este gran ser vivo virtual” puede disparar elementos para destuir el paso de las ardillas. Arrojará rocas, tirará una sustancia pegajoza e inclusive puede agarrar a los roedores y tirarlos por los aires.
Las ardillas no son comunes, tienen ciertas habilidades específicas.
- Zip se mueve muy rápido y es casi imposible de atrapar
- Chunk es algo pesado pero lleva un escudo muy resistente
- Doug es pequeño y se esconde bajo tierra con su pala
- Sim construye rampas al estilo fornite y es muy hábil distrayendo
Además, dentro del campo existen hongos que nos ayudarán a saltar por los aires, una especie de calabaza que nos ayudará a cubrinos, y por último también podemos utilizar arbustos para escondernos.
