Los cuentos de fantasmas y otras apariciones han sido reportados en casi todas las culturas. Casi todos hemos escuchado historias de terror relacionadas con fantasmas o espíritus que habitan en ciertas casas o lugares antiguos. Sin embargo para los científicos esta extraña sensación de que alguien está cerca cuando nadie está realmente presente y no se puede ver es en realidad una hazaña fascinante de la mente humana.

Una investigación llevada a cabo en Suiza, en la que han participado también científicos de Japón e Israel, explica de forma científica el fundamento de esas viejas creencias. Por primera vez un equipo de neurocientíficos ha logrado inducir en el laboratorio una “aparición” en voluntarios sanos que se prestaron a ello.

El experimento se realizó engañando al cerebro de los participantes, para que de esta manera exista un conflicto entre lo que sentían y lo que hacían. Producto de está confusión se logró que los participantes percibieran una “presencia extraña”, que definen como la sensación de que alguien está cerca cuando en realidad no ven a ninguna persona a su alrededor.

thisrobotmak.mp4

En primera instancia los investigadores analizaron los cerebros de 12 pacientes con trastornos neurológicos, en su mayoría epilepsia, que habían experimentado algún tipo de “aparición”. Encontraron la clave en tres regiones corticales: la corteza insular, la corteza frontoparietal y la corteza temporoparietal. Estas tres áreas están involucrados en la autoconciencia, el movimiento y el sentido de la posición que ocupamos en el espacio. Juntas, contribuyen al procesamiento de señales multisensoriales, fundamentales para la percepción del propio cuerpo.

Después, llevaron a cabo un experimento en el cual con los ojos vendados los participantes sin ninguna patología realizaron movimientos con la mano delante de su cuerpo. Detrás de ellos había un dispositivo robótico que reproducía sus movimientos, tocándolos en la espalda. Este toque se llevaba a cabo simultánemente a los movimientos de los voluntarios, o con un ligero retraso. Cuando se producía un retraso entre los movimientos del participante y el toque del robot no se llevaba a cabo la integración de la percepción temporal y espacial, y los participantes sintieron la ilusión del fantasma: la sensación de una presencia extraña. Este trabajo se ha publicado en “Current Biology

Otra sensación que ayuda a la “aparición” de los fantasmas es el cansancio o el miedo extremo. Se conocen varias historias de personas que sujetas a esta situación han asegurado sentir la presencia de alguien más aunque no lo ven. El equipo de científicos encabezado por el neurólogo Olaf Blanke aseguran que en realidad, esto es el resultado de una integración defectuosa de las señales sensoriomotoras como el tacto, posición el cuerpo y movimiento.

Estas señales son fundamentales para crear la conciencia de nosotros mismos al integrarse en el cerebro la información procedente de nuestros movimientos y la posición de nuestro cuerpo en el espacio. Si esta integración falla, como en el caso de cansancio extremo, miedo o desórdenes neurológicos, se crea en el cerebro la sensación de una presencia extraña. “Los fantasmas existen, pero están en nuestro cerebro”, señalan los investigadores.

[vimeo 111114673 w=500 h=375]

Crean fantasmas en el laboratorio from Luis Alfonso Gámez on Vimeo.

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.